En Izumo, una ciudad al oeste de Japón, fueron hallados en pésimas condiciones 164 perros, abarrotados en una pequeña casa, ya que sus dueños no les permitían salir.
Los canes se encontraban aglomerados debajo de mesas, sillas y estantes, rodeados de sus propias heces. La mayoría de ellos estaban infestados de parásitos y desnutridos. Los dueños los mantenían hacinados en un espacio de 30 metros cuadrados y aseguraron a las autoridades no tener recursos para esterilizarlos.
“Todo el piso estaba lleno de perros y todo el espacio que se podía ver estaba cubierto de heces”, declaró Kunihisa Sagami, jefe del grupo de derechos de los animales Dobutsukikin.
Fue gracias a la denuncia de vecinos y a grupos animalistas que los perros fueron rescatados y atendidos por médicos veterinarios. Por ahora se encuentran en un refugio a la espera de ser adoptados.
De acuerdo con información del grupo de derechos de los animales Dobutsukikin, la acumulación de mascotas es una tendencia que viene en aumento en Japón y está asociada a la vejez, la pobreza y el aislamiento.
Con información de Magaly Montoya.
