La primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, anunció este miércoles en conferencia de prensa virtual, el sacrificio de 17 millones de visones luego de que una mutación del virus SARS-CoV-2, detectada en estos animales, pasara a humanos.
Frederiksen afirmó que de no sacrificar a los visones, podría verse amenazada la eficacia de una futura vacuna contra el COVID-19 para los humanos. Según Kare Molbak, epidemiólogo de Dinamarca, la mutación encontrada en las granjas de visones del país es “particularmente preocupante, porque la proteína espiga a la que afecta es el objetivo de las vacunas”.
Las autoridades sanitarias del país detectaron casos de COVID-19 en 217 de las mil 139 granjas de visones del país, la mayoría de ellas ubicadas al norte de la Península de Jutlandia, zona en la cual se encuentra una gran cantidad de estas granjas. Además, ya se detectaron 12 casos de esta nueva cepa en humanos.
“Tenemos una gran responsabilidad hacia nuestra propia población, pero con la mutación que ahora se ha encontrado, tenemos una responsabilidad aún mayor también hacia el resto del mundo”, declaró la primera ministra.
Con información de Magaly Montoya
