* El recinto del Inbal presentará la obra de Philippe Amand, Jorge A. Vargas y Luis de Tavira, hasta el próximo 03 de marzo
CIUDAD DE MÉXICO, 29 de enero de 2024.- La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) presentan la obra Matteo Ricci, espectáculo de Philippe Amand, Jorge A. Vargas y Luis de Tavira, basado en el texto del propio de Tavira en trabajo conjunto con José Ramón Enríquez y José María de Tavira, la cual se podrá disfrutar hasta el próximo 03 de marzo, jueves, viernes y sábados a las 19:00 horas, y domingos a las 18:00, en el Teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque (CCB).
La pasión de Matteo Ricci por conocer al “otro” es el alma de esta puesta en escena, destinada a producirse en 2020, para estrenarse finalmente en 2023 en el Teatro de las Artes del Centro Nacional de las Artes, luego que dos hechos afectaron su montaje y a nuestra sociedad por completo: la Covid-19 y los asesinatos de los misioneros jesuitas Joaquín Mora y Javier Campos, en Chihuahua en 2022.
En palabras de Jorge A. Vargas: “Matteo Ricci es un proyecto muy ambicioso y de grandes retos, donde el principal ha sido su dimensión colaborativa, es decir ese espacio en donde se pueden cruzar distintos pensamientos y saberes sobre los modos y las formas de hacer teatro hoy”.
Conectando pasado y presente, este espectáculo cuenta la aventura del jesuita renacentista Matteo Ricci (1552-1610) en la China de los Ming, fundador de la Sinología, al tiempo que crea memoria sobre el asesinato de los jesuitas Joaquín Mora y Javier Campos en la Sierra Tarahumara en México.
Las escenas de esta obra recorrerán los episodios de la aventura del italiano al corazón de la legendaria Catay en el tiempo de la dinastía Ming; los pasos apasionados del admirable sabio Li Matau, como es recordado con profunda estimación en la China actual, su inquietud espiritual, su prodigiosa formación renacentista en el Colegio Romano; su azarosa aventura marítima, Goa, Cochín y el descubrimiento alucinado de Oriente, y Maccao y las puertas inaccesibles de China, las primeras misiones de Zhaoqin y Shaozhu, los errores y los aprendizajes, los malentendidos, el naufragio y las expulsiones, el regreso tenaz, los descubrimientos y la amistad, la enseñanza generosa, la integración, el Mapamundi con China al centro.
La traducción al chino de los principios matemáticos de Euclídes y la composición del asombroso tratado de la amistad, que integra en un mismo humanismo, la antropología clásica y la ética de Confucio. El arribo a la Ciudad Prohibida, la fundación de la primera misión de Beijing, su observatorio astronómico, la formación científica del ministro Xu Wanqui y la revolución agrícola de China en el siglo XVII.
Matteo Ricci llevó por primera vez hasta sus límites el intento de conciliación entre las creencias antinómicas, como el confusionismo y el cristianismo. Como lo describe el propio Luis de Tavira: “Esta obra es un testimonio que plantea la posibilidad de la amistad entre culturas y la amistad entre los diferentes y entre nosotros mismos. Es un homenaje a quienes dedicaron su vida a salir al encuentro del diferente y a intentar superar el malentendido en que está tramada la relación entre los hombres”.
Esta obra trata una historia que devela la complejidad del encuentro entre culturas lejanas en mágicas atmósferas que nos permiten experimentar la amplitud del mundo, son plasmadas con soluciones multimedia de grandes dimensiones del ojo del escenógrafo e iluminador Phillip Amand. La plasticidad de esta pieza se complementa con el diseño de vestuario a cargo de Carlo Demichelis y Jerildy Bosch que evoca el siglo XVI y las máscaras creadas por el artista José Pineda y los títeres de Susy López Pérez.
Este viaje épico es acompañado por el diseño sonoro de Joaquín López Chapman, Jesús Cuevas y Pedro de Tavira y la composición coral de Juan Pablo Villa que se ejecuta en vivo. En escena dando vida a decenas de personajes: Esther Orozco, Rocío Leal, Alejandra Garduño, Patricia Yáñez, Valentina Manzini, Cecilia Sordo Morán, Ricardo Leal, Héctor Holten, Andrés Weiss, Adrián Aguirre y David Martínez Zambrano.
Con una magistral interpretación musical en vivo de Jesús Cuevas, la escena es intervenida por los sonidos de instrumentos como el Hardy-gurdy o zanfona, el guzheng, el bawu, el guantzi, la alghoza, el sheng, el cromorno, el shawm, el chapareque, los gongs y el tambor tarahumara.
Se trata de la pieza final de la trilogía producida por Enrique González Torres, S.J., que da testimonio del quehacer de grandes jesuitas que han transformado la visión y el estar en el mundo. En 2011 hizo memoria del arrojo del humanista Francisco Javier Clavijero y sus compañeros jesuitas hacia el exilio en La expulsión, y en 2018 las grandes hazañas del paleontólogo Pierre Teilhard de Chardin en El corazón de la materia, ambas dirigidas también por el maestro Luis de Tavira.
