En ciudades con suelos de asfalto, con jardines artificiales y con relaciones envasadas en empaques biodegradables, parece ser que a la pregunta de si ¿hay futuro para las parejas en la era de las redes sociales y el amor líquido? Pregunta que quedo en la mesa la semana pasada, la respuesta parece ser sencilla, la respuesta es Sí. Sí hay futuro, si entendemos que amar es un verbo, un verbo que toma sentido cuando se actúa por él, cuando se lucha por él, cuando se construye con él.
Hay futuro cuando entendemos que amar no es sinónimo de poseer, no es pariente de las mentiras y los malos tratos. Dejando de lado la nostalgia y la ausencia de nuestras aspiraciones y entendiendo que el otro no está obligado a cumplirlas, nosotros tampoco estamos obligados a cumplir las aspiraciones del otro.
El problema de la nostalgia es que nos resulta adictiva, anhelamos aquello que ya no fue y que pudo ser (al menos en nuestra cabeza), nos aferramos a relaciones que nos mutilan no sólo el cuerpo, también los sueños, las sonrisas y la voz. Vamos recogiendo lo que otros tiran, nos comemos lo que otros dejan, aunque sean migajas, encendemos luces, aunque los focos ya estén fundidos, sembramos donde la tierra erosionó hace tiempo.
Es cierto que ¡ya no hay tiempo! No para perderlo en comedias románticas que inventan que las historias de amor terminarán bien. No es cierto, también amar nos duele, amar también nos transforma, amar también nos da vida o no la quita. Si, el dolor también es parte del amor. El problema es que no somos conscientes del dolor que podemos aguantar y anestesiamos al cuerpo obligándolo a permanecer con unos zapatos que no son de nuestro número. Escuchen, así, cuando el zapato nos aprieta es difícil avanzar, por los tanto si el amor te aprieta seguramente no es de tu talla.
Hoy les invito a mirarse al espejo, a sonreírle a la persona más importante del mundo, a despeinarla con el viento y a enamorarse de esa sonrisa suya, les invito a mirar al amor más puro, más genuino, ese que le llaman “amor propio”, regálense un halago, un abrazo, un apapacho, no necesitamos a los de afuera si por dentro tenemos un jardín vivo. Hoy mírese al espejo y escríbase una carta o dos o muchas, donde se platiquen todo lo que se aman, todo lo que les queda por vivir, donde se perdonen, también, todo el dolor que han vivido por amores frustrados, hoy ya no se mientan más, hoy más que nunca grítese su amor propio. Si no lo hay… vaya usted a terapia.
Les regalo un pedacito de una canción que dice: “No te des gato por liebre si tu amor propio te es infiel y hazle caso a tu ave fénix, arde y luego ponte en pie”
Ardan… todo lo que necesiten, pero luego, luego pónganse en pie.
Vamos a despedirnos con algunas respuestas a sus preguntas:
Fernanda, buenas tardes. Tengo la siguiente inquietud: por lo regular soy muy sexual, me masturbo de 2 a 3 veces al día y sin problema. Mi novia es de Querétaro y yo de la CDMX, cuando nos vemos para tener intimidad, todo empieza súper bien, pero después de unos minutos como que ya no me siento tan excitado. Mi pregunta es ¿Debo dejar un poco la masturbación y solo tener relaciones sexuales? Muchas gracias de antemano por la atención
La masturbación no afecta el apetito sexual, al contrario, las personas que se masturban con mayor frecuencia además de conocer más su cuerpo, pueden tener mayor control sobre el mismo, los hombres que se masturban seguido, por ejemplo, tienen mayor control en la eyaculación. Lo que recomiendo es que sean creativos en sus encuentros sexuales, comuníquense que es lo que les prende y que no durante el acto sexual, esto además de mantener vivo el deseo puede hacer que la pareja se sienta más acoplada y tenga un mayor disfrute sexual, ahora si a ella le pasa lo mismo y se le disminuye el deseo acudan a terapia de pareja donde les aseguro se resolverán estos problemas de excitación.
Al estar con mi mujer todo bien en el primer raund, en el segundo ya ni aire tengo, no levanta el campeón, pero cuando estoy con otra señorita me rifo como el santo ¿a qué se debe madrina?
Sería interesante que nos compartas tu edad, aunque es cierto que ahora las farmacéuticas han avanzado en medicamentos que ayudan al desempeño sexual, esto puede deberse como en la pregunta anterior a que las parejas solemos caer rápidamente en la rutina, por eso es que buscamos experiencias nuevas con otras personas, lo ideal es mantener puentes de comunicación efectivos y contarnos todo aquello que nos excita, pero también aquello que no es de nuestro agrado, esto ayuda a tener una relación de pareja de confianza y placentera. Ahora si es un asunto más físico ay que acudir al médico o a nuestro terapeuta para descartar cualquier problema fisiológico.
¿Por qué no me gusta el sexo oral?
¿Por qué habría de gustarte? El sexo oral es una práctica sexual muy común en las parejas, sin embargo, no es regla. Esto debemos entenderlo muy bien cuando estamos con el otro, hablarlo y negociar en el sexo es muy importante, si a ti no te gusta comunícalo a tu pareja, si ella te lo pide, dependerá de ti si quieres intentarlo, como recomendación te invito a que pruebes condones con sabores suaves que sean de tu agrado, hay lubricantes también de sabores que resultan buena opción, si no tienes en el momento te invito a probar frutas como fresas, duraznos en almíbar y quizá si no te importa la dieta, un poco de crema batida. Si de plano el sexo oral es algo que no va contigo platícalo con tu pareja quizá descubran otra manera de estimularse y sentir placer.
¿Es malo masturbarse más de dos veces al día?
Es delicioso, hágalo más seguido, las veces que usted desee, desmitificar lo dicho entorno a la masturbación, el autoconocimiento y el autoplacer es tarea de todos, bien por ti. Sólo recuerda hacerlo en un lugar donde te sientas seguro y dónde no incomodes a otros.
Ya cumplimos un mes… Gracias por hacerlo posible…Gracias a usted que lee, a usted que participa, a usted que comparte y a usted que pregunta. Gracias, gracias muchas.
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