* El jefe de Gobierno de la Ciudad de México explicó que la llamada “Ley Paola Buenrostro” establece penas más severas en comparación con el homicidio y homicidio calificado. Se incluyó una serie de agravantes que aumenta en un tercio la sanción de prisión a quien atente contra una mujer trans
* La tipificación del transfeminicidio se suma al trabajo iniciado por la entonces jefa de Gobierno y hoy presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, en favor de los derechos de las personas de la comunidad LGBTTTIQ+
CIUDAD DE MÉXICO, 23 de agosto de 2024.- El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, encabezó la publicación en la Gaceta Oficial del Decreto de reformas para tipificar el delito de transfeminicidio en la Ciudad de México, con sanciones que van de los 35 a los 70 años de prisión, y de esta forma avanzar en la construcción de garantías para que las personas de la comunidad LGBTTTIQ+ ejerzan plenamente sus derechos.
“Aquí está la publicación de la Gaceta de hoy donde aparece la reforma para incorporar el delito de transfeminicidio en el Código Penal de la Ciudad de México. (…) Con ello, no solo se hace una reforma formal, sino que se envía un mensaje claro a la sociedad: la violencia contra las mujeres trans no será tolerada en la Ciudad de México”, subrayó.
Ante activistas y personas trans reunidas en el patio del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, el mandatario explicó que la también llamada “Ley Paola Buenrostro” fue aprobada por el Congreso capitalino el 18 de julio pasado e incluye cambios al Código Penal y Código Civil, la Ley Orgánica de la Fiscalía General de Justicia y la Ley de Víctimas, todos de la Ciudad de México.
De esta forma, añadió, se define el transfeminicidio como el delito que comete quien, por razón de identidad de género o expresión de género, prive de la vida a una mujer trans o a una persona cuya identidad o expresión de género, real o percibida, se encuentre dentro del espectro femenino de género; además, las personas sentenciadas por transfeminicidio serán añadidas por un lapso de 10 a 30 años en el Registro de Personas Agresores Sexuales.
“Entre estas reformas hay un punto clave, que es la sanción, no toda la reforma es la sanción, pero este es un punto muy importante. El homicidio se castiga, de acuerdo al Código Penal, con una pena que va de ocho a 20 años de prisión; el homicidio calificado, es el que tiene agravantes, se castiga con una pena que va de 20 a 50 años de prisión. Quiero comentarles que el transfeminicidio se castigará con una pena que va de 35 a 70 años de prisión, o sea, la pena, la sanción, el castigo es mucho mayor”, destacó.
La pena, dijo, se agravará hasta en una tercera parte de la sanción, cuando la víctima presente señales de saña relacionadas con su identidad o expresión de género; cuando el delito sea cometido en el contexto de trabajo sexual; cuando sea cometido por dos o más personas; cuando sea cometido en presencia de una o más personas con quienes la víctima tuviere un vínculo de parentesco, afectivo, laboral o de confianza; cuando la víctima sea menor de edad, adolescente, persona con discapacidad o persona adulta mayor; cuando la víctima sea una persona en situación de calle, y cuando haya recibido amenazas de muerte relacionadas con su identidad o expresión de género, ya sea de forma presencial o virtual.
Martí Batres señaló que la “Ley Paola Buenrostro” fortalece el sistema penal y fue impulsada desde abajo por organizaciones, activistas y colectivos trans, además de avanzar en el Congreso local hasta su aprobación gracias al trabajo de los legisladores Temístocles Villanueva y Ana Francis López Bayghen Patiño.
“Con esta determinación, en efecto, la Ciudad de México avanza en la construcción de garantías de los derechos de la comunidad LGBTTTIQ+. Es un logro crucial por diversas razones: porque visibiliza una violencia particular que enfrentan las mujeres trans; porque esta tipificación contribuye a eliminar las barreras culturales, sociales, políticas, judiciales que impiden el ejercicio pleno de sus derechos; porque se establecen penas más severas y se facilita la persecución de los responsables; porque es un paso importante hacia la igualdad y la inclusión; y, porque también se reconocen los derechos y la dignidad de las mujeres trans”, agregó.
El mandatario aseguró que el gobierno está obligado a escuchar, por lo que se comprometió a atender los reclamos y quejas externadas por la comunidad trans para garantizar sus derechos y una vida libre de violencia.
En su intervención, el director general de Diversidad Sexual y Derechos Humanos en la Secretaría de Bienestar e Inclusión Social (SEBIEN), Jaime Morales Beltrán, aseguró que las reformas contra el transfeminicidio representan un gran avance de la sociedad.
“Con la publicación de la Ley ‘Paola Buenrostro’ en la Gaceta Oficial, damos un paso enorme no solo como instituciones, sino como sociedad; y gracias al empuje de activistas, organizaciones colectivas y defensoras de derechos de las personas trans, el paso lo damos hacia la protección y reconocimiento del derecho a la vida libre de violencia, a una vida digna y plena, sin miedo a vivir libremente la propia identidad de género”, señaló.
Jaime Morales afirmó que las mujeres trans son guerreras y resaltó el caso de Kenya Cuevas, quien se convirtió en activista a raíz del homicidio de su amiga Paola Buenrostro, que llevó a crear esta ley, aunque llamó a no bajar la guardia ante “grupos antiderechos” que buscan derribar este tipo de conquistas.
“Este logro es una muestra clara y contundente del compromiso de las y los legisladores a favor de la transformación de la ciudad y del país, como han sido Temistocles Villanueva y Ana Francis Mor. Así como la claridad con la que el jefe de Gobierno, el doctor Martí Batres Guadarrama, ha conducido las riendas de la Ciudad de México a favor de los derechos humanos con la publicación de esta conquista, consolidando la perspectiva con la que inició su gobierno la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, y que ahora rendirá frutos a nivel nacional”, mencionó.
Por su parte, el diputado local Temístocles Villanueva aseguró que el activismo trans es el mayor ejemplo de dignidad hoy en día en la población LGBTTTIQ+ y destacó el trabajo de la Comisión de Derechos Humanos local, cuya recomendación sobre el caso Paola Buenrostro llevó a trabajar por la tipificación del transfeminicidio, esfuerzo que se suma a otras acciones a favor de la diversidad sexual en este sexenio.
“Son seis años en los que hemos tratado de construir la agenda de reformas más progresistas en la historia de la Ciudad de México. Avanzamos en la derogación del peligro de contagio, avanzamos en la tipificación de las terapias de conversión, creamos la Ley para el Reconocimiento y la Atención de las Personas LGBTTTIQ+, garantizamos la universalidad en la atención y prevención al VIH, sin duda queda mucho más por hacer”, complementó.
En tanto, la activista Kenya Cuevas Fuentes, recordó la lucha iniciada a partir del transfeminicidio de su amiga Paola Buenrostro, y subrayó que esta es una batalla ganada por toda la comunidad.
“Hace ocho años que mataron a Paola, para mí esto era impensable, el hecho de visibilizar las problemáticas de las mujeres trans era ir contra corriente, contra el sistema (…) Siempre va a valer la pena luchar por nuestros ideales y nuestras convicciones y todo lo que imaginemos en esta vida es real si nuestros corazones así lo desean”, comentó.
La activista Natalia Lane dijo que es importante tipificar el transfeminicidio porque visibiliza una forma específica de muerte de las mujeres trans, y pidió que se avance en garantizar el acompañamiento a las víctimas, la reparación y no repetición del daño tanto a mujeres y hombres trans, así como a personas no binarias.
“Necesitamos una justicia que repare, que sane, que acompañe a las víctimas y a las sobrevivientes, que nos escuche”, afirmó.
Finalmente, el periodista y promotor de la iniciativa, Genaro Lozano Valencia, reconoció a las mujeres y activistas trans como las promotoras de las reformas mencionadas y confió en que la tipificación del transfeminicidio avance en todo el país. Con esta ley, la Ciudad de México es la segunda entidad en tipificar el feminicidio, después de Nayarit.
“La Ley Buenrostro trae la semilla, la semilla de la justicia a las víctimas de transfeminicidios y hace una cosa bellísima, que es lo que estamos viendo este día: amplía el concepto de familia, ya lo mencionaban Kenya y Natalia; las personas trans que son asesinadas de repente son olvidadas por sus familiares sanguíneos, pero no por sus hermanas trans, no por sus hermanos de la diversidad sexual”, resaltó.
Finalmente, destacó el apoyo del jefe de Gobierno, Martí Batres, a las iniciativas en favor de las personas LGBTTTIQ+ no solo desde su actual cargo como titular del Ejecutivo local, sino desde que era senador electo en 2018.