Este lunes la NASA dio a conocer que gracias al satélite TESS se descubrió un planeta semejante a la Tierra, el cual orbita una estrella roja enana, misma que es más pequeña que nuestro Sol. De forma que, se trata de un planeta que podría contar con agua, lo que lo convertiría en un lugar con probabilidades de ser habitable.
A pesar de que el satélite en un principio había calificado equivocadamente al cuerpo celeste, los expertos corrigieron el error:
«Cuando corregimos los parámetros de la estrella, los tamaños de sus planetas se redujeron y nos dimos cuenta que el de más afuera era como del tamaño de la Tierra y estaba en la zona habitable», afirmó Emily Gilbert, una estudiante de posgrado en la Universidad de Chicago.
El planeta fue bautizado con el nombre de TOI 700 d, completa una órbita cada 37 días y se encuentra aproximadamente a 100 años luz de la Tierra, así lo informó el Jet Propulsion Laboratory de la NASA en una conferencia en Hawái.
Con información de: Paulina García M.
