Luego de que Martha fuera diagnosticada con esclerosis lateral amiotrófica, en 2018, su condición física se ha ido deteriorando a lo largo de estos 3 años, pues esta enfermedad le ha ido quitando movilidad por la falta de fuerza en sus extremidades y podría terminar postrada en una cama, sin la posibilidad siquiera de comer, aún con ayuda.
Aunque en un principio tomó la noticia de la mejor manera, al darse cuenta que su muerte sería lenta y dolorosa, Martha luchó porque le fuera concedida la eutanasia, la cual logró y se llevará a cabo este domingo a las 7 de la mañana y con lo que podrá fin a esta enfermedad grave e incurable.
En una entrevista concedida a BBC Mundo, ella y su hijo relatan lo difícil que fue para Federico Redondo, apoyar a su madre en la decisión que había tomado, pero al darse cuenta que su negación era un acto egoísta, optó por apoyar a su mamá, como lo dice él mismo «Creo que demuestro más mi amor si la apoyo en esta decisión que ella tomó».
Por su parte Martha asegura que desde que le fue concedido el procedimiento eutanásico, ríe más y duerme más tranquila, en propias palabras, menciona: «Soy una persona católica, me considero muy, muy creyente. Pero Dios no me quiere ver sufrir a mí. Con una esclerosis lateral en el estado que la tengo, lo mejor que me puede pasar es que me vaya a descansar».
Luego de que se le aplique dicho procedimiento, se cremarán sus restos y concluirá con una celebración eucarística, tal y como ella lo pide.
Federico asegura en esta desgarradora entrevista a la BBC, que cuando todo esto pase nada volverá a ser lo mismo: “La voy a extrañar mucho. Yo creo que no hay nada que no vaya a extrañar, porque nada volverá a ser lo mismo. Nada.”
“Desde su sonrisa y su berraquera y su buena actitud ante lo bueno y lo malo de la vida… hasta sus regaños. Todo me hará falta.”