Por Ximena Delgado
Una modificación al artículo 83 de la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes en el estado de Sinaloa prohibirá, a partir de este año, ejercer cualquier tipo de violencia contra menores de edad, incluyendo el uso de chanclas y cinturones para propinarles golpes. Si bien el artículo todavía no indica cuáles serán las sanciones para aquellas personas que utilicen contra los niños este tipo de represalias y violencia, sí menciona que las personas mayores deberán:
“Abstenerse de cualquier atentado contra su integridad física, psicológica o actos que menoscaben su desarrollo integral; así como de ejercer cualquier tipo de violencia en su contra, en particular el castigo corporal. El ejercicio de su patria potestad, tutela o guarda y custodia no podrá ser justificación para incumplir la obligación prevista en la presente fracción”.
La nueva ley, popularmente conocida como “ley chancla” o “ley antichancla” fue aprobada por unanimidad en el congreso. Según datos locales, alrededor de un 63% de la población infantil ha experimentado al menos una vez en la vida una forma similar de “escarmiento” físico y/o psicológico por parte de sus padres, tutores o algún familiar. Esperemos que esta medida se extienda a lo largo de toda la república para que nadie más sienta “la furia de la chancla”.
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