La Secretaría de Cultura capitalina y el Fideicomiso para la Promoción y Desarrollo del Cine Mexicano en la Ciudad de México (PROCINECDMX)realizaron este martes en el Museo de la Ciudad de México la proyección musicalizada en vivo de la película La fórmula secreta del director Rubén Gámez.
La función fue presentada por la titular de la Secretaría de Cultura capitalina, Claudia Curiel de Icaza, y el director de PROCINECDMX, Cristián Calónico Lucio, quien aseguró que con esta película se corona la celebración del Día Nacional del Cine Mexicano, ocurrido el pasado 15 de agosto: “este es nuestro evento más importante del festejo y quisimos hacerlo con una película crítica y contestataria, en lugar de una clásica de la Época de Oro”.
En este sentido Curiel de Icaza dijo que está película, también conocida popularmente como Coca-Cola en la sangre, “tiene una gran importancia, no sólo por ese espíritu contestatario, sino también por haber contado con la participación de Juan Rulfo en el texto y Jaime Sabines en la narración”.
La funcionaria destacó que esta obra de culto fue la ganadora del primer Concurso de Cine Experimental en 1965 y agradeció al Sonido Xibalbá, encargado de musicalizarla en vivo para esta función especial.
El mediometraje experimental y surrealista de Gámez causó polémica por la crítica hacía instituciones como la familia y los abusos de la iglesia; pero también es considerada una metáfora de la pérdida de la identidad nacional ante la influencia extranjera a través de escenas como la inyección de una Coca-Cola vía intravenosa en un cuerpo, la de una tira de salchichas recorriendo la ciudad o un listado extenso de marcas transnacionales.
Esta función fue musicalizada por Sonido Xibalbá, grupo mexicano que tiene como propuesta realizar un tributo a pioneros en el mundo audiovisual, desde el inicio de la música para cine, y que para esta ocasión se alejó de la música elegida originalmente por Gámez, de Antonio Vivaldi e Igor Stravinsky.
Tras la proyección de la película el crítico de cine Praxedis Razo moderó una mesa de análisis con la participación de la directora de cine Annalisa D. Quagliata; Nahún Calleros Carriles, colaborador del Banco de imagen de la Subdirección de Acervos de la Filmoteca UNAM; Manuel Trujillo “Morris”, del Laboratorio Experimental del Cine, y Armando López Castañeda, nieto del productor de La fórmula secreta, Salvador López.
Manuel Trujillo aseguró que esta es una obra que ha influenciado a diversos cineastas y convirtió a Rubén Gámez en uno de los mejores directores nacionales, aunque “en su tiempo la película pasó desapercibida quizá porque el país estaba influenciado en una cinematografía más hollywoodesca”.
Pese a que podría ser considerada un trabajo adelantado a su época por las escenas con una mirada de crítica social, con temas como el maltrato animal o la muerte de sacerdotes, Nahún Calleros Carriles, colaborador del banco de imágenes de la Subdirección de Acervos de la Filmoteca de la UNAM, destaca que esos temas lo hacen un filme de protesta y una importante crítica hacia las instituciones.
Por su parte, Annalisa D. Quagliata catalogó al filme como un clásico de culto: “es algo que con el tiempo mantiene esa admiración e incluso crece; además de que no forma parte de un canon más establecido”.
Asimismo, resaltó la experimentación de la música electrónica de Sonido Xibalbá, que dista mucho de la música clásica “aunque también es tanta la combinación”.
En su oportunidad, Armando López Castañeda rememoró el vínculo que tiene con su abuelo, quien produjo La fórmula secreta, con Rubén Gámez, a quien consideraba como un genio y por quien guardaba una gran admiración profesional.
Las actividades de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México se pueden conocer en su página oficial (https://cultura.cdmx.gob.mx/), en la Cartelera Cultural de la Ciudad de México y a través de sus redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.
