Definitivamente la situaciones más complicadas como la que vivimos actualmente saca lo peor de algunas personas.
En esta ocasión, un joven pasante de enfermería en Guadalajara, fue atacado por un desconocido a bordo del transporte público.
Cuando el pasante subió a la unidad, algunos pasajeros comenzaron a toser a propósito a modo de burla, uno de ellos se levantó y parecía que iba a bajar pero le arrojó un café en la cara.
Al confrontar a su agresor, la respuesta fue que los iba a contagiar de coronavirus; una mujer intentó defender al joven pero fue inútil.
Metros adelante el conductor bajó a los agresores de la unidad, y desafortunadamente, no pasó nada, se fueron como si no hubieran hecho nada.
Con este, suman al menos 12 agresiones documentadas a personal de salud. ¡Basta!
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