Los cuerpos de Patrick Jesernick, de 54 años y Cheryl Schriefer, de 59 años, fueron hallados con heridas de balas. Las investigaciones señalan que se trató de un pacto suicida, pues la pareja creía que estaban infectados de COVID-19.
Los hechos ocurrieron en la ciudad de Chicago, en Estados Unidos. Según las investigaciones realizadas por la policía, Cheryl se realizó la prueba de COVID-19 dos días antes, ya que tenía problemas para respirar y los resultados no llegaban.
Al inspeccionar la casa, los cuerpos de Patrick y Cheryl estaban en habitaciones distintas inundados de sangre. Se encontró un revolver cargado en la mano de Patrick, por lo que se cree que el hombre mató a su esposa de un disparo y luego se suicidó.
“Las puertas y ventanas estaban cerradas desde adentro. Las pertenencias se encontraban en sus lugares, el hogar estaba en orden”, informó la policía.
En la autopsia realizada, Patrick y Cheryl dieron negativo a COVID-19.
Descubre más desde Fernanda Tapia
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.