En estos días donde cada vez tenemos menor esperanza en la humanidad, hay personas que nos hacen ver que un cambio sí es posible, y que si todes nos unimos, el mundo puede ser mejor ♥.
Este fue el caso de Celio Pereira, un hombre jubilado de la ciudad brasileña de Paraná; compró cuatro boletos para una rifa que realizó Margaret, una mujer con dos tumores cerebrales que se vio en la necesidad de rifar su coche para cubrir los gastos de su cirugía, lo que le esperaba a la mujer con esta rifa es algo que no se ve todos los días.
Margaret necesitaba 5 mil dólares para costear su cirugía.
Cuando Margy se enteró que estaba enferma, no se dio por vencida, y decidió rifar su única fuente de empleo, pues esta gran mujer trabaja como conductora en una aplicación de transporte; para su fortuna, todos los boletos se vendieron y logró juntar el dinero.
La gran sorpresa que ella se llevaría cuando Celio se ganó el vehículo, es que nunca pensó en quedárselo, únicamente quería ayudarla a cubrir los gastos de su cirugía.
“Sabía que ella usaba el automóvil para trabajar, que era su única fuente de ingresos. Cuando compré cuatro boletos del sorteo, prometí que si ganaba no me quedaría el auto. Mi objetivo era ayudar y no obtener el premio”.
Ahora veamos el momento… y no, no estoy llorando, se me metió un poco de esperanza en el ojo ?